15 Organizaciones No Gubernamentales latinoamericanas dedicadas a la investigación no letal y conservación de cetáceos, solicitaron a los comisionados de la región liderar activamente el proceso de modernización de la Comisión Ballenera Internacional
Por el Instituto de Conservación de Ballenas
En el marco de la reunión intersesional de la Comisión Ballenera Internacional que se está llevando a cabo en Tampa (EEUU), 15 Ongs de Argentina, Brasil, Chile, Costa Rica, Colombia, Guatemala, Nicaragua, Panamá y Venezuela entregaron un mensaje a los Comisionados de la región solicitando la modernización de este organismo internacional y la detención de los denominados programas de “caza científica” de ballenas que lleva adelante Japón.
Como resultado de las reuniones de realizadas a fin de definir el futuro de la CBI, se formó un grupo de trabajo integrado por 24 de los 81 países miembros. Dentro de estos países se encuentran Argentina, Brasil, Chile, Costa Rica, México y Panamá representando los intereses conservacionistas Latinoamericanos. La Reunión en Tampa, es el primer encuentro de este grupo que tendrá como desafío analizar 33 temas claves que dividen actualmente este foro. Entre esos temas se encuentran el bienestar animal, cambio climático, participación de la sociedad civil, caza costera, moratoria, comité de conservación, áreas marinas protegidas, santuarios, uso no letal, frecuencia de reuniones,etc.
La carta que fue enviada por las organizaciones de manera simultánea a las Cancillerías respectivas, afirma que “en la nueva etapa que inicia la CBI es central definir de manera participativa e informada lo que los gobiernos y la comunidad internacional esperan del proceso de modernización, el que deberá impulsar profundos cambios que posibiliten a la CBI asumir de cara al siglo XXI las nuevas realidades políticas, ambientales y culturales que enfrentan la conservación y el manejo no letal de las poblaciones de cetáceos”.
En relación a la moratoria sobre la caza comercial de ballenas que Japón, Islandia y Noruega buscan levantar con el objetivo de reiniciar la captura comercial de ballenas a nivel mundial, las organizaciones declaran en el texto que “históricamente la CBI sólo pudo cumplir con el objetivo de conservar las poblaciones de ballenas después de adoptada la moratoria demostrando que por sus características biológicas, estos mamíferos marinos son extremadamente vulnerables a los impactos generados por las operaciones balleneras”.
Al referirse a las operaciones de la denominada “caza científica” de ballenas realizadas por Japón, las organizaciones fueron enfáticas en advertir que éstas “no sólo representan una continua amenaza para la conservación de nuestras poblaciones de cetáceos, sino que revelan la urgente necesidad de avanzar hacia la modernización de una Convención que resulta anacrónica y sin capacidad de respuesta frente a las necesidades sociales y problemas ambientales del siglo XXI”.
Adicionalmente, las organizaciones solicitaron a los Comisionados “definir las recomendaciones para la 61ra reunión anual de la CBI entre las cuales se destacan cuatro puntos prioritarios como suspender todas las actividades de caza científica por constituir un mecanismo de presión que imposibilita generar un buen ambiente de negociación; eliminar las operaciones de caza científica en los Santuarios establecidos por la CBI y promover la creación de nuevos Santuarios, como el del Atlántico Sur; incorporar el término uso no letal de las ballenas en el estatuto de la Convención; asegurar el acceso a la información, transparencia y la plena participación de las organizaciones de la sociedad civil en los diversos procesos institucionales de la Comisión”.
Roxana Schteinbarg, coordinadora del ICB explica “este proceso es fundamental, ya que a pesar de la disfuncionalidad imperante, gracias a las medidas tomadas por este organismo muchas poblaciones de cetáceos se pudieron recuperar. Si bien en las primeras décadas la CBI se ocupó de la sobreexplotación de los cetáceos, con el transcurso de los años implementó acciones que contribuyeron a la conservación de los cetáceos positivamente: la moratoria, los santuarios, una mejor gestión de los cupos de caza de ballenas de subsistencia, el comité de conservación, el abordaje de los temas ambientales. Estos resultados muestran que lo único que se necesita ahora es fortalecerla aun más hacia la conservación...es decir adecuarla a los tiempos modernos. A través de esta carta enviada esperamos que los comisionados tomen un rol activo en este grupo de trabajo para que finalmente la CBI logre la adecuada gestión y conservación de los cetáceos.”
El texto fue firmado por la Fundación Cethus (Argentina), el Instituto de Conservación de Ballenas (Argentina), Centro Golfinho Rotador (Brasil), Projeto Baleia Franca (Brasil), Centro de Conservación Cetacea (Chile), Centro Ecoceanos (Chile), Fundacion Omacha (Colombia), Fundación Promar (Costa Rica), Asociacion de Biologia Marina (Guatemala), Club de Jóvenes Ambientalistas (Nicaragua), Comité Ballena Azul (Nicaragua), ASVEPA (Panamá), Fundacion Agua Clara (Venezuela), Sea Vida (Venezuela) y la Oficina Regional México, CA & El Caribe de la Sociedad Mundial para la Protección Animal (WSP)
0 comentarios:
Publicar un comentario
Y vos qué decis??