Nicaragua no defiende a ballenas

Por: Wilder Pérez R.

La ausencia de Nicaragua en una reunión que la Comisión Ballenera Internacional (CIB) sostiene en Tampa, Florida, Estados Unidos, es cuestionada por los grupos nacionales que defienden a las ballenas, ya que así el país se abstiene de defender la vida de estos cetáceos y la nueva alternativa económica de algunas comunidades costeras.

En la reunión, conocida como Pequeño Grupo de Trabajo, la CBI pretende levantar la suspensión de la cacería de ballenas vigente desde 1986, luego de que estos mamíferos llegaran al borde de la extinción.

Si los participantes de este encuentro se ponen de acuerdo, la cacería de ballenas se legalizaría en junio, en la reunión mundial de la CBI a realizarse en Marruecos, África.

El Comité Ballena Azul, que defiende la vida de los cetáceos, y el biólogo Peltier Barahona, miembro de la Fundación para el Desarrollo Sostenible de Nicaragua (Fundenic), que asesora el grupo Arrecife, de avistamiento de ballenas, coincidieron en que el Gobierno del presidente Daniel Ortega debería estar en la reunión en Florida, defendiendo los intereses nacionales.

“Es muy probable que este foro abra la posibilidad de que en la reunión de junio se legalicen las operaciones de cacería que Japón realiza en las aguas del santuario Austral, lo cual significa un peligro para las poblaciones de ballenas y las comunidades costeras de los países latinoamericanos que nos beneficiamos económicamente del turismo de avistamiento de estos cetáceos”, expresó Yanina Luna, del Comité Ballena Azul.

La necesidad de defender a las ballenas no se limita a su existencia, también tiene que ver con economía local.

Barahona explicó que los cetáceos cazados por varios países en aguas lejanas son los mismos que llegan a Nicaragua cada año entre diciembre y febrero.

Esto significa que si la CBI permite la matanza de ballenas, las embarcaciones que se ganan 200 dólares por cada viaje para ver cetáceos en San Juan del Sur, departamento de Rivas, perderían ese dinero extra, ya que las posibilidades de avistar a estos animales se reducirían o serían nulas.

 Fuente: La Prensa 

http://www.laprensa.com.ni/2010/03/05/nacionales/18088